Recetas deliciosas para bebés y niños.

Los bebés pasan de conseguir su alimento a través de la succión -del seno materno y/o del biberón- a degustar sus comidas en papilla y para ello se inicia en el uso de los cubiertos. La cuchara es la primera en aparecer, se recomienda ofrecer el alimento a cucharadas y lo menos sólido posible al iniciar la ablactación, alrededor de los 4 meses (*). No sucumbas a la tentación de ofrecerle papillas en biberón, es importante que aprenda la experiencia de los bocados en cuchara, que al principio un adulto le acercará y después será él mismo quien se lleve a la boca la cucharada. Deja su taza o vaso entrenador únicamente para sus bebidas.

Así, las papillas serán sus primeras sopitas. Muy aguaditas al principio y poco a poco ganarán consistencia mientras el bebé prueba todos los alimentos para los que está listo. Después vendrán los trocitos de comida que podrá tomar con la mano, para familiarizarse con la consistencia, pero es necesario enseñarle a usar el tenedor. Al año de edad los bebés se incorporan a la dieta familiar y pueden dominar los cubiertos.

¡A estrenar cuchara y tenedor!

Las cucharitas de mango corto con la punta blanda son las ideales para los bebés que empiezan a comer sin ayuda (aproximadamente a los 10 meses). Elige cubiertos especiales para bebés con los extremos curvos, impiden que se introduzca demasiado el cubierto en la boca o la garganta.

Sopas y cremas

Puedes prepararle sopa con casi cualquier verdura y adicionar leche en polvo o leche materna para hacer una crema para los menores de 1 año. Con leche de vaca, crema o yogur para los mayorcitos.

Papas, zanahoria, espinacas, col, betabel, brócoli, col, calabacita, chayote, champiñones, chícharos, etc. Y las leguminosas en caldo son lo mejor: frijoles, habas, alubias, lentejas, garbanzos.

Sopa de coliflor.
Receta sencilla para probar nuevos sabores.
  • 1 coliflor pequeña o media si es grande
  • 1/2 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharada grande de mantequilla
  • Orégano o nuez moscada en polvo
  • Sal y pimienta

Pon a cocer con una pizca de sal la coliflor lavada y media cebolla hasta que estén suaves. Licúa con el agua de cocción. Aparte, calienta la mantequilla en una cazuela, agrega la coliflor ya licuada y sazona con pimienta y un poco de sal. Para darle un toque de sabor agrega nuez moscada u orégano.

Crema de elote.
Receta básica muy fácil de preparar.
  • 4 elotes desgranados
  • 1 cebolla pequeña picada finamente
  • 2 dientes de ajo
  • 3 cucharadas de mantequilla
  • 1 taza de leche
  • 3 cucharadas de harina
  • 3-4 tazas de agua o de caldo de verduras

En una sartén, derrite la mantequilla y calienta ahí la cebolla. Aparte licúa los granos de elote con el caldo o el agua. A esta mezcla agrega la leche y vierte todo en la sartén con las cebollas. Sazona a tu gusto, déjalo a fuego lento durante 20 minutos. Al servir agrega un poco de crema.

Sopa de pera.
Sorprende a tu hijo con esta sopa que puedes servir en frío, también.
  • 2 peras maduras
  • 2 tazas de caldo de pollo
  • 1 zanahoria pelada y cocida
  • 1 taza de pechuga de pollo cortada en pequeños cubitos
  • 1 limón, el jugo

Pela las peras y córtalas en mitad. Pon a hervir el caldo de pollo y agrega las peras hasta que se suavicen. Retíralas del fuego y en la licuadora muele éstas con la zanahoria y el jugo de limón. Listo. Agrega los trocitos de pollo para servir.

Sopa minestrone.
Introduce desde casa los pequeños paladares a la cocina internacional.
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 cebolla pequeña morada picada
  • 2 zanahorias picadas
  • 1 trozo de poro rebanado
  • 2 papas picadas finamente
  • 2 calabacitas picaditas
  • 2 jitomates pelados
  • 150 g de espinacas
  • 1 ramita de cilantro
  • 1.5 litros de caldo de verduras o agua
  • 1 taza de garbanzos o alubias
  • ½ taza de chícharos ya cocidos
  • 45 gr de pasta de coditos ya cocida
  • 1 cucharadita de orégano seco
  • Sal y pimienta

Dora la cebolla en el aceite, añade la verdura picada y cocina hasta suavizarla, añade los jitomates molidos con el caldo. Agrega los garbanzos y chícharos. Deja hervir a fuego lento por 20 minutos y después agrega la pasta y condimenta con el orégano, sal y pimienta. Sírvela con un poco de queso rallado.

"Pastas" Macarrones con queso, fáciles de preparar (evita comprar las cajitas que ya vienen con polvito de queso, éste contiene saborizantes, colorantes y aditivos nocivos para la salud).
  • 2 ½ cucharadas de mantequilla
  • 1 taza de leche evaporada
  • 120 g de queso gruyere rallado
  • 1 paquete de macarrones de 250g., hervidos y escurridos
  • 2 cucharadas de harina
  • Una pizca de sal

A fuego medio, derrite la mantequilla en una cacerola, añade la harina y mezcla hasta obtener consistencia de pasta. Agrega la leche poco a poco sin dejar de mover hasta que espese y se incorpore totalmente. Agrega el queso hasta que se derrita (reserva 2 cucharadas de éste para la hora de servir). Añade los macarrones y mezcla bien con la pizca de sal. Sírvelo, les encantará a tus hijos.

Espagueti al atún.
Tendrás una comida completa con esta receta.
  • 250 g de espagueti ya hervidos y escurridos
  • 1 lata o sobre de atún
  • 250 g de salsa de tomate casera
  • ½ taza de queso parmesano rallado
  • 10 aceitunas sin hueso

Mezcla en la licuadora la salsa de tomate con el atún, viértela en un sartén para calentarla. Sírvela sobre la pasta, espolvorea el queso rallado sobre ésta y adorna con las aceitunas picaditas.

Tornillitos verdes.
Sorprenderás a todo color a tus niños con este platillo.
  • 1 taza de pasta de tornillos de pasta ya cocida
  • 1 taza de cilantro
  • 2 cucharadas de queso cottage
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • Una pizca de sal

Mezcla en la licuadora el aceite de oliva y el cilantro. A la pasta ya fría, agrégale esta mezcla tipo puré y el queso. Dale sabor con una pizca de sal y listo.

Ravioles alfredo.
Elige el relleno que más les guste a tus hijos: carne, queso, espinacas.
  • 1 kg de ravioles recién hervidos
  • ½ taza de queso parmesano
  • ½ taza de leche
  • ½ taza de crema
  • 1 cucharada de mantequilla
  • 1 cucharada de harina de trigo
  • ½ taza de cebolla rallada
  • ½ taza de perejil recién picado
  • Sal y pimienta al gusto

En una olla dora la cebolla en la mantequilla, agrega la harina y revuelve hasta formar una pasta y agrega la leche. Deja que se cocine la harina hasta hervir y agrega el queso. Sazona con sal y pimienta. Agrega los ravioles a la olla. Adórnalos con un poco de perejil al servir al plato.

*La mayoría de los pediatras te sugieren iniciar a los 6 meses para evitar riesgos con respecto a las intolerancias o alergias alimentarias.

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